La última obra de la banda de metal progresivo noruega Leprous vio la luz el pasado 2013, y desde luego no paso desapercibida. Han sido bastantes las páginas en las que se ha hecho eco «Coal», lo cual me creó grandes expectativas tanto en torno a la agrupación cono en torno al disco, decidiéndome el mes pasado a sumergirme en su último esfuerzo. Y la verdad es que el impacto que tuvieron en mi fue similar (el tiempo dirá si acierto o estoy exagerando) al de cuando escuché por primera vez un LP de Opeth, Anathema o The Ocean: ¿Donde han estado metidos todo este tiempo? ¿Por qué no me decidí a escucharlos antes?
Elegancia y emotividad de corte progresivo
Cada día me planteo más seriamente el echo de que en los países nórdicos llevan lo de crear buena música en los genes. Este es el primer álbum que escucho de Leprous, y desde la primera de las numerosas escuchas que le he dado en este corto periodo de tiempo sabía que me habían ganado como fan. La propuesta se deja de prodigios instrumentales para centrarse en la faceta más emotiva del género, sabiendo explotarla de una forma asombrosa. Sin duda el elemento principal del disco es el espectacular chorro de voz que posee Einar Solberg, mostrando un elevadisimo nivel como cantante, y haciendo uso, salvo pequeños matices, de su voz limpia en la totalidad del LP (la colaboración de Isahn en «Contaminate Me» se encarga de compensar la ausencia de guturales). En el aspecto vocal la única crítica clara que le podría hacer es en «Foe», donde la parte de coros agudos que realiza Einar me parece excesiva e innecesariamente prolongada, aunque con las escuchas he llegado al final a disfrutarla.
En el vídeo de «The Cloak», primer single del LP, se puede observar el claro lavado de imagen que se ha pegado la banda, ya no solo en un ligero cambio de estilo musical, sino que han dejado atrás rastas e indumentaria más psicodélica para embutirse en unos trajes y tomar una pose mucho más elegante (reconozco que no me desagrada el cambio). La canción actúa bastante bien como representante del larga duración, captando la esencia de sencillez instrumental, virtuosismo vocal y una perfecta atmósfera cargada de emotividad.
«Foe» da un comienzo lento y calmado al disco, mientras que «Chronic» muestra la faceta enérgica, conteniendo algunos de los registros vocales más agresivos. «Coal», el tema homónimo del álbum, continua el camino marcado por la segunda canción en cuanto a duración y estilo, encerrando al final una de mis melodías vocales favoritas. Einar está demostrando tener mucho que aportar con su voz, demostrando no solo una técnica impecable, sino también variedad de registros y originalidad.
Si tuviera que nombrar una canción favorita dentro del último trabajo de Leprous (algo difícil ya que esta muy equilibrado) esa sería «The Valley». Dura 9 minutos, pero sin necesidad de muchos cambios, pasajes enrevesados ni solos eternos, algo lógico en temas de larga duración. Sin embargo es una canción que aprovecha esa sencillez al máximo, desarrollándose de una forma muy épica, creciendo la atmósfera hasta alcanzar al final el punto álgido en ese estribillo perfecto rodeado de coros e instrumentación perfecta. Pero a pesar de ser mi favorita al disco aun le queda por decir. «Salt» es un tema breve y lento, similar a la línea que siguen «Foe» o «The Cloak». «Echo» tiene un desarrollo más cercano a las citadas «The Valley» o «Chronic», creando una de las mejores atmósferas del LP basándose en coros de Einar básicamente, y presentando a mitad del tema una parte bastante más rítmica (destacable en todo el disco el trabajo al bajo de Martin Skrebergene y a las baquetas de Tobias Ørnes Andersen). La encargada de finalizar «Coal» será «Contaminate Me», la canción con más garra del LP.
«Echo» podría haber puesto fin al disco y hubiera sido un final perfecto, pero la verdad es que agradezco el papel que cumple «Contaminate Me». Quizás puede quedar un poco fuera de lugar respecto al resto de temas, tanto por el planteamiento más agresivo que rompe con la coherencia atmosférica de todo el disco, como que al estar al final da la impresión de estar un poco descolocada, pero la verdad es que como tema me parece perfecto. Para el cuentan con colaboración de Isahn al micrófono. Para los que desconozcan su nombre, Isahn fue vocalista de la legendaria banda de black metal Emperor (durante el auge del género en los países nordicos en los años 90, perteneciendo al conocido como «Inner Circle»), y Leprous previamente a desarrollar su propia carrera eran la banda que acompañaba a Isahn en los directos durante sus giras como solista. Si a esto le sumamos que Einar es el cuñado de Isahn, es una colaboración muy lógica, notándose la experiencia previa que tienen juntos en «Contaminate Me», siendo por si solo un tema perfecto.
Ahora mismo puedo decir que «Coal» es uno de mis discos favoritos de 2013, y Leprous una de las bandas que más respeto me infunden. El tiempo dirá si se mantiene y asciende al resto de bandas de progresivo que protagonizan mi «Olimpo» personal, o se desinfla para ser uno de mis discos preferidos de un determinada etapa.
Buena reseña, he escuchado los enlaces y están muy bien, quizá deberían haber escogido una canción más movida para el video, como Coal que a partir de 4:35 es brutal xD, y la mejor para mí de las que he escuchado es Contaminate me, precisamente porque es más agresiva y… y por Ihsahn claro jeje.
Y ya que estamos en la noruega progresiva, recomiendo la banda Ark, con un metal progresivo muy melódico, y con músicos como la copa de un pino, como Jorn Lande.
Gracias por comentar Sergio, me alegro de que te gustara «Coal»! Me guardo en spotify Ark, que por lo que comentas tiene buena pinta jaja