Con la publicación de hoy continuaré ahondando en esa parte de la escena nacional sobre la que he ido hablando en artículos anteriores. Y es que, es sorprendente como en los últimos años están surgiendo numerosas bandas con una propuesta instrumental. Los dos referentes más consolidados serían, en la vertiente más ambiental (pero no por ello falta de garra) los madrileños Toundra, que encima progresivamente se están haciendo con un público numeroso; y en el lado más matemático Jardin de la Croix, con un sonido mucho más denso y técnico. Pero son solo la punta del iceberg, pues son muchas y variadas las agrupaciones de estos estilos que asolan la península. De hecho en el blog ya os he hablado de varias de ellas, como son Ciconia, Our Next Movement o Kermit. Hoy vamos a desgranar el debut de una banda catalana, que pese a que vio la luz el año pasado, me ha parecido buena idea analizarlo, tanto para destacar la calidad del mismo como para continuar en mi intento de destacar este auge de la música instrumental.
La banda en cuestión se llama 9M Lied, son de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona), y su música podría calificarse como post-rock, pero sin quedarse solamente ahí. Este (como cualquier género) es interesante en cuanto a que engloba a las agrupaciones con un determinado sonido o atmósferas dentro del estilo, facilitando así el descubrimiento de nuevos grupos. Pero, a mi parecer, es una etiqueta que engloba a veces bandas con planteamientos bastante diferentes. Así que preferiría decir que 9M Lied practican rock instrumental, que tiene partes ambientales con reminiscencias post, sí, pero también otras de influencias más progresivas.
El grupo está conformado por Aníbal y David a las seis cuerdas, Jose a las baquetas y Andrei al bajo. Se consolidarían en 2011, enfocándose desde el principio como banda de directos y grabando las primeras maquetas, habiendo dado desde entonces un buen número de conciertos en Cataluña (tocando junto a bandas como Toundra o La Habitación Roja en el Festival Sintonitzza FISC 2012). Ya en 2013 vería la luz su LP debut, titulado de la misma forma que la banda. Actualmente van a tomarse un descanso respecto a los directos, para ir gestando las ideas del que será su siguiente trabajo, siendo pues este un buen momento para saborear lo que cocieron los barceloneses en «9M Lied«. Sumerjámonos en los 47 minutos del debut homónimo de la banda.
«Night Rider» comienza mostrándonos esa cara más post-rockera. Unos punteos introducen un tema lento, desarrollándose al ritmo de la batería mientras las guitarras van creciendo, primero de forma cristalina para posteriormente cargarse de distorsión, volviéndose el tema más intenso por momentos. «Dolphins vs. Penguins» se mantiene dentro del mismo estilo, un corte envolvente que sin embargo no renuncia a una guitarra principal con mucha presencia.
«La Niña de la Curva» presenta unas guitarras cargadas de efectos que le dotan de un ligero toque psicodélico. La estructura sigue el mismo camino, de comienzo lento para posteriormente desatar la energía contenida. «Devon» se desmarca, ofreciéndonos desde el principio unos instrumentos más afilados, demostrando que de la misma forma que caben las atmósferas evocadoras, también tienen su lugar en el larga duración los riffs más duros.
«Dead Dust» se encuentra entre mis favoritas del LP. La intro tiene algo que me recuerda a la banda sonora de un western, aunque quizás sea simplemente la influencia del nombre de la canción. Sigue el ejemplo marcado por los tres cortes iniciales, de menos a más, pero la verdad es que las melodías que construyen las guitarras, sostenidas de forma muy apropiada por la sección rítmica, tienen algo que me encanta. De «Mosquito Tiger» destacar el comienzo, que te atrapa desde el primer segundo.
Con «Summer Song» vuelven a apostar por los ambientes oníricos, pide cerrar los ojos y dejarte llevar por la música. En «Body Milk Nº5» (hay que ver con que nombres han bautizado los temas!) el rol principal lo lleva la batería, sobre la cual el resto de músicos construyen las atmósferas. «Ojos de Pollo/Piel de Sapo» nos muestra un tema de rock instrumental rápido, cargado de matices, con una guitarra muy acertada en la segunda mitad de la canción.
«The Blackhole» es, con sus ocho minutos de duración, el corte más ambicioso del álbum, lleno de progresiones, actuando como un cierre perfecto para el álbum. «9M Lied» es un debut cargado de aciertos, mostrándonos a una banda que, aun teniendo un sonido con bastantes elementos típicos del género, está pleno de personalidad, marcando los primeros pasos de una banda que puede tener mucho que aportar en el futuro. La única pega es que me deja la sensación de que quizás podrían haber dicho lo mismo con un par de temas menos. Esperaré con ganas el siguiente trabajo de los catalanes, no dudo de que será uno de los discos a tener en cuenta dentro del género en 2015.