Volvemos a hablar de Noah Histeria por estos lares. Después de su paso por el Chu Fast Prog, con un interesante y arriesgado concierto instrumental debido a la ausencia de su vocalista Juan, no pudimos evitar pedirles que compartieran con nosotros aquellos discos que más les han marcado, de forma similar a como lo hicimos con Our Next Movement y The Third Grade. Si hay algo que caracteriza la música de la banda de Xátiva es su eclecticismo, encerrando matices de estilos muy diferentes, lo que le hace ganarse con facilidad la etiqueta de progresivo. Tras leer esta entrevista se entiende un poco mejor el porqué suenan como suenan.
Alex (Guitarra): Opeth – Ghost Reveries
«Me encanta Opeth porque me encanta la fusión. Por simplificar, siempre me han parecido una mezcla entre una banda de death metal y una de rock progresivo; las medidas de cada una varían según qué álbum, y su discografía es una paleta de estilos de música que es demasié. Por lo que sea, cierto tío amante del rock progresivo se ve metido en las tendencias de una época death metal y de ahí salen estas cosas como Opeth, de la fusión, sin inhibiciones. Lo cierto es que, a pesar de la variedad de ingredientes que componen su arte, me parece una mezcla muy homogénea y compacta. Me parece que son inconfundibles y genuinos, y esto en la época en la que los escuché por primera vez, sea por lo que sea, me caló hondísimo. Flipaba con las estructuras de las canciones, los acordes disonantes, el riffaje monstruoso y críptico, el tremendo growl de Mikael Akderfeldt (a día de hoy es mi Guitar Hero), los pasajes de folk que directamente te transportan a otro sitio, etcétera. Elijo «Ghost Reveries» por la simple razón de que fue el primer disco con el que me topé de ellos, poco después de que saliese, si no recuerdo mal.»
Juan (Voz): Tool – 10,000 Days
«El disco que más te ha marcado… Llevo con esto las últimas dos semanas, intentando darme cuenta de si el primer disco que se me vino a la mente es realmente el que más me ha marcado. Tras 15 días de reflexión, y sabiendo que en esta vida uno no puede estar absolutamente seguro de nada, diría que sí, que es ése: «10,000 days».
Explicar por qué es lo realmente complicado. Si la música se pudiera explicar simplemente con palabras… sería poesía. No conozco a Tool desde sus inicios, de hecho, los conocí años más tarde de que lanzaran su último álbum. He tenido que volver atrás, bucear en la Wikipedia, leer entrevistas, ver infinidad de directos suyos vía Youtube. Es la banda que más ha calado en mí. Probablemente «The Pot» sea el tema que más veces haya escuchado en los últimos 3 años, puesto que es la canción de cabecera de los viajes con Noah, se ha convertido en algo más que un ritual.
Centrándome en el disco, desde «Vicarious» hasta «The Pot», los primeros 38 minutos y 23 segundos del álbum son insuperables, sinceramente, no creo que vuelva a escuchar en mi vida 38 minutos y 23 segundos de música tan… superlativa. Me parece sencillamente superior, y eso que la música no se puede comparar, que no tiene sentido, pero es la sensación que me queda, que estoy escuchando algo único, algo que está en lo más alto (cuando cierro los ojos, siempre me imagino a un enorme rey de piedra en la cima de una montaña, contemplando, impasible). Después de 27 años, tras 10,000 días de sufrimiento, postrada en silla de ruedas a causa de un aneurisma cerebral paralizante, la madre de Maynard descansó, desplegó sus alas y marchó… Y Maynard por fin pudo sentir la paz, se esfumó la rabia, la incontinencia de sus letras, el dolor de su voz. Y eso es lo que hay en este álbum: paz.
A nivel musical, Tool acaba de perfilar su sello alcanzando la perfección de su sonido. Siempre buscaron decir mucho con poco, minimalismo al servicio de la grandeza. Quizás muchos entendidos no estarán de acuerdo conmigo, pero yo veo minimalismo en su música, no buscan la complejidad impostada, el alarde técnico, llegan hacia donde les conduce la música, apenas cuentan con 2 riffs por tema, no más, y sobre ellos experimentan, regroovean, trazan caminos curvos para poder cerrar el círculo. Su obsesión son las canciones redondas, tortuosas, irregulares, con muchas aristas, pero que al final siempre quedan circunscritas en ese círculo perfecto (curiosamente, como el nombre de otro de los proyectos de Maynard: A Perfect Circle).
Tool es la banda de la que más he disfrutado y aprendido (tengo libretas enteras analizando sus estructuras). Me he imaginado tantas veces estar con ellos en un ensayo… Estoy convencido de que su secreto radica en las horas, la paciencia para experimentar, para trazar nuevos caminos, buscando la elegancia de lo simple (simple y elegante, como todo físico desearía que fuera cualquiera de sus teorías), probando y disfrutando del camino (hay mucho amor en su música, eso se ve) y no cejando en su empeño hasta conseguir cerrar el círculo, su círculo.»
Javi (teclados): Muse – Black Holes and Revelations
«Para mí, uno de los discos de obligada escucha para cualquier amante del rock contemporáneo y que más veces he escuchado en los últimos años y, por tanto, más ha influenciado en mi manera de componer, es sin duda «Black Holes & Revelations» de Muse.
Dudo que nombre aquí todos los motivos que decantan mi decisión. Lo que sí tengo claro es que el disco marcó un antes y un después en su carrera, y considero que aúna lo mejor de todos sus anteriores discos y despunta lo que será una música bastante más sintética y artificiosa (lo cual ha tenido sus detractores, aunque no me encontraré yo entre ellos porque una banda que no evoluciona es una banda cansina) de lo que eran sus anteriores obras.
En primer lugar, me quedo con la forma en la que evolucionan la mayoría de las canciones del disco. Tienen una evolución, los riffs tienen su razón de ser y dan pie a otras estrofas que resultan lógicas y culminan explosivamente, tal y como puede observarse, sin ir más lejos, en las canciones que abren y cierran el LP («Take a Bow» y «Knights of Cydonia» – considero ésta su mayor composición hasta la fecha – ). Esta evolución también la podemos observar en la progresión de los acordes y en modulaciones capaces de impresionarte por su natural salto entre tonalidades.
Como teclista y pianista que soy de Noah histeria, no puedo dejar de lado el importante papel que en este disco tiene el uso de órgano, piano y sintetizadores e instrumentos orquestados, y cómo encajan a la perfección a nivel conceptual de lo que se quiere transmitir en cada una de las canciones en las que aparecen. Mención especial para los “arpegios espaciales” que abren el disco, las cuerdas que aparecen en las últimas canciones del disco o la épica del piano en «Hoodoo». Todo ello en una versión previa del protagonismo que alcanzarían en su siguiente obra, «Resistance», pero que aquí ya funcionan como anillo al dedo.
Además de todo ello, y entrando en, quizás, un aspecto más personal, las idas de olla de Matt Bellamy en relación a su incansable búsqueda de contacto con vida extraterrestre, así como sus constantes críticas al sistema (la portada del disco es una verdadera obra de arte cargada de simbología al respecto que merece la pena observar con atención) entran en consonancia con mi forma de ser y mi personalidad inquieta y pocas veces conformista. Además, tanto en la música como en las letras compuestas por él, ha reflejado perfectamente todo lo que buscaba transmitir, así que no me queda más que aplaudir semejante obra.»
Daniel (batería): Bring Me The Horizon – Sempiternal
«Aunque el hecho de tener que escoger un solo disco es algo que no me ha resultado nada fácil, finalmente tras haber tenido que elegir primero los Top 3, me he decantado por el “Sempiternal” de Bring Me The Horizon.
Años atrás ya conocía a dicha banda, pero nunca me paré a escucharla ya que me parecía que venían desde las mismísimas tinieblas, y más todavía cuando yo venía de la oleada punk de California. Cuando sacaron este último disco es cuando me dije a mi mismo “eh, esto de los gritos y ritmos más pesados tiene su puntito”, y vaya que sí lo tenía, como que luego me papeé toda su discografía (incluyendo el «This is what the edge of your seat was made for») y me adentré a escuchar más grupos pertenecientes al death, math, metal y todas sus variantes.
Hablando acerca del disco, el hecho de haber mezclado voces limpias con gritos agresivos y ensordecedores, hicieron que me gustaran este tipo de voces, cosa que anteriormente no podía escuchar y fue gracias a Oli el que a día de hoy me vuelva loco al escuchar esas voces rotas, desgarradoras y a grito pelado. La producción que hay detrás del disco es tremenda, todo está muy bien pincelado y en su sitio con mucho mimo, dejando espacio a cada instrumento cuando le corresponde y respetando mucho los matices, consiguiendo así unos cambios constantes de ritmo, coros pegajosos, unas atmósferas que te invaden dentro de ellas, unos breakdowns con una fuerza descomunal, y un largo etc.
En definitiva, es un álbum completamente equilibrado, el cual me abrió las puertas hacia nuevos estilos, lo que también me llevó hacia nuevos retos sobre la batería, ya que el listón de complicidad crecía a medida que iba descubriendo nuevos grupos.
Para terminar, os dejo con la canción del álbum que más furia me transmitió, lo cual nunca me había sucedido y me sorprendió.»
Salva (bajo): Tesseract – Altered State
«Yo voy a ser breve. No sé si es mi favorito, pero tengo claro que está entre los tres primeros. Lo que sí sé, es que es realmente el disco que más me ha marcado. Él es: “Altered State”. Es el segundo LP del grupo Tesseract, aunque para mí era lo primero que escuchaba de ellos. Metal progresivo, con unos pasajes increíbles, fuerza, calma, grandiosidad, clase, cambios de ritmos, planos exquisitos de todos los instrumentos. Este disco marcó un antes y un después en la música que escuchaba diariamente, me abrió la mente, me ayudó a entender y interpretar poliritmias, incluso a llevar a otro nivel la manera de tocar mi instrumento.
El álbum está dividido en 4 bloques: «Of Matter», «Of Mind», «Of Reality» y «Of Energy». Mi movimiento favorito diría que es «Of Energy», lo tiene todo, riffages increíbles, calma, slaps, unos planos de bajos espectaculares. Excelente producción y mezcla desde mi punto de vista.»