Amorphis llevaba ya bastante tiempo en mi lista de pendientes, mi compañero de redacción seruli lleva años recomendándomelos, e insistió el año pasado en que escuchará su último trabajo (cosa que finalmente no hice). Si que había escuchado algunos singles y temas sueltos, y lo cierto es que su propuesta me resultaba interesante… pero no terminaban de ganarme. Hasta la semana pasada. De camino a nuestro ensayo semanal saltó un tema de los fineses en el coche, y el estribillo quedo incrustado en mi cabeza. En cuanto llegué a casa la busqué y terminé de engancharme, no había vuelta atrás.
Estos días he estado curioseando el disco al que pertenecía «Silver Bride«, el tema en cuestión. Y la verdad es que en «Skyforger» Amorphis se presentan como una banda con un estilo bastante propio. De donde viene su sonido está claro, el death melódico y el doom metal son la clave para entender su fórmula. Pero la voz es generalmente melódica, aunque a veces recurra a unos más que acertados guturales. Las melodías tienen un deje muy épico, además con teclados que tienen un peso bastante importante. Que decir de las guitarras evocadoras casi celestiales en temas como «Sky is Mine», y como se compaginan con el piano en «My Sun».
Aun me falta perspectiva con el resto de su discografía para poder hablar en condiciones sobre Amorphis, pero ese es un error que no voy a tardar en enmendar. «Silver Bride» me parece una verdadera joya que reúne todo los elementos para ser uno de sus himnos en directo: melodías épicas y emotivas, estribillo coreable y pegadizo y una buena dosis de energía.