En diciembre parte del equipo de Spreading the Sound acudimos a la presentación del primer EP de los valencianos Rainwood. Decidí ir a ciegas respecto a las bandas que le acompañaban en el cartel, desconociendo hasta el estilo que hacían… y, como en tantas otras ocasiones, volví a llevarme una sorpresa con lo que podemos descubrir en la escena underground. Navvier consiguieron cerrar la noche por todo lo alto con su acercamiento a la electrónica en un formato rock en vivo. Al día siguiente busqué por las redes a ver si encontraba algo de material que tuvieran publicado, aun se repetían en mi mente esas melodías árabes reminiscentes a videojuegos de mi infancia, las guitarras armonizadas o el genial uso de los sintetizadores… pero no tenían nada publicado. Por suerte ha tenido que pasar muy poco tiempo para que este problema tuviera solución.
Apenas un mes después nos llega el primer EP de esta particular formación. Particular en el mejor sentido de la palabra, porque desde luego tienen un sonido muy propio que les hace fácilmente identificables. Tras pasar por Millenia Estudios nos presentan «Pentathlon EP«. Cuatro cortes que con una gran producción nos muestra en estudio lo que ya habíamos presenciado en el Loco Club.
«Taj Mahal» es la encargada de abrir, reconociéndola como una de las que más me gustó en directo. En la crónica que hice en el concierto hice un paralelismo entre su estilo y el de Carpenter Brut, y al escucharlo ahora la verdad es que me parece aún más marcado. Melodías muy poco convencionales para la electrónica, con un estilo exótico y clásico. Disfrutaras igual moviendo la cabeza con sus sólidos ritmos que desgranando todos los detalles del rompecabezas. Las voces robóticas de «H.A.R.P.S.» sobre los sintetizadores funcionan muy bien. El pasaje instrumental vuelve a traer esas reminiscencias clásicas. Si Mozart fuera productor de electrónica sonaría parecido.
En «Neon» este paralelismo se mantiene, sin voces pero porque el tema no las necesita, una pieza redonda en la que Carpenter Brut reaparece en mi mente , pues el parecido es incuestionable. Sin duda uno de los puntos fuertes del EP es el gusto que han tenido en todos los arreglos que encontramos, que gracias a la calidad de la producción podemos apreciar de forma cristalina. «Zócalo» es la encargada de cerrar, con un aire marcadamente cinematográfico y colaboración del productor de electrónica Bearoid.
Un EP que actúa como muy buena carta de presentación respecto a lo que podemos esperar de NAVVIER: un grupo con una visión ecléctica de la música que encuentra su identidad en la fusión de elementos que de primeras muchos no pensarían que pueden funcionar juntos.