Las sensaciones que me producen los trabajos de Illenium son ambiguas. Por un lado me parece que su estilo se basa demasiado en el mismo patrón de EDM, y que eso hace que su fórmula se arriesga a no tardar demasiado en quedar encasillada. Pero, por otro lado… la verdad es que es una fórmula realmente efectiva. Y yo también he caído víctima del hechizo del Dj. Pues pese a lo más o menos predecible de la estructura de sus canciones, nadie puede poner en duda la capacidad que tiene para emocionar con sus temas. Da hasta rabia.
Con lo que digo al principio no estoy poniendo en duda el talento compositivo de Miller, pero si que sería una pena que no explotara su potencial imponiéndose límites para encajar en lo que se espera de un músico como él. Illenium es la clase de artista que aparece en el momento adecuado, sabiendo hacer una lectura de las tendencias imperantes y llevarlas a su propio terreno, y dándole ese toque personal conseguir que su nombre termine calando en todos los aficionados a esa clase de sonidos.
Con su último trabajo «Awake» introdujo algo más de variedad en su sonido respecto a «Ashes», pero manteniendo la misma linea estilística. De hecho me resulta complicado llamarlo álbum como tal, ya que es prácticamente una colección de temas sueltos que ha ido publicando en el espacio de tiempo que separa ambos discos. No es la clase de disco cohesionado para escuchar de principio a fin, pero si que se pueden disfrutar buena parte de los cortes de manera individual. Temas como «Free Fall» o «Leaving» son verdaderos temazos, u otros como «Taking me Higher» se desmarcan de la tónica general y resultan refrescantes, dando más importancia a las texturas que al beat. «Sound of Walking Away» brilla sobre todos los demás. Quizás por la aportación de Kerli al micrófono, quizás simplemente estaba más inspirado a nivel compositivo y de producción, pero sin duda me parece las mejor representativa de esa capacidad de Illenium para tocar nuestra fibra sensible.
Spreading the Sound 